Seguidores

viernes, 22 de julio de 2011

Tenía miedo a enamorarme.  Por eso creé un muro alrededor de mi corazón. Me encerré en mi misma. No quería que nadie pudiera llegar a él. Porque sabía que si volvían a hacerme daño no podría recuperarme. Así que después de que me hicieran daño por última vez, construí un muro. Pensé que así sería todo mejor. No enamorarme. No tener que sufrir por alguien. Creí que de ese modo podría ser más feliz y en cierto modo lo parecía, me hacía creer que lo era, pero una parte de mí sabía que no era enteramente feliz, que me faltaba algo. Algo que me había prohibido. Algo a lo que había dicho que no. Y quise que así siguiera, pero entonces llegaste tú. Poco a poco el muro que había construido alrededor de mi corazón empezó a resquebrajarse, empezaron a salir grietas hasta que conseguiste romperlo. Aún me pregunto cómo lo has hecho. Pero lo único que sé es que ya no hay marcha atrás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario