Seguidores

viernes, 22 de julio de 2011

Tenía miedo a enamorarme.  Por eso creé un muro alrededor de mi corazón. Me encerré en mi misma. No quería que nadie pudiera llegar a él. Porque sabía que si volvían a hacerme daño no podría recuperarme. Así que después de que me hicieran daño por última vez, construí un muro. Pensé que así sería todo mejor. No enamorarme. No tener que sufrir por alguien. Creí que de ese modo podría ser más feliz y en cierto modo lo parecía, me hacía creer que lo era, pero una parte de mí sabía que no era enteramente feliz, que me faltaba algo. Algo que me había prohibido. Algo a lo que había dicho que no. Y quise que así siguiera, pero entonces llegaste tú. Poco a poco el muro que había construido alrededor de mi corazón empezó a resquebrajarse, empezaron a salir grietas hasta que conseguiste romperlo. Aún me pregunto cómo lo has hecho. Pero lo único que sé es que ya no hay marcha atrás.

lunes, 11 de julio de 2011

Bad day.

Hay días en los que te sientes la persona mas feliz del mundo, que nadie puede hacerte daño, que tienes como objetivo pasártelo bien, sin preocupaciones ni nada que pueda hacer que te derrumbas o que te moleste. Pero,  en cambio, hay otros días que sientes que el mundo esta en contra tuya. Solo quieres estar sola, sin que te molesten con gilipolleces; e incluso lloras y sientes que no eres nada. Quieres desaparecer, quieres que todo acabe. No sabes el motivo por el que estas así y eso te agobia aún más. Te encierras en tu habitación. Intentas hacer algo con lo que entretenerte para no pensar ello, pero no puedes siempre acabas pensando en ello. Crees que eres la única que le pasa estas cosas y que tu vida no sirve para nada, que no tiene sentido. Pero simplemente es un día malo, no una vida.